La presentación pública de Red Force supuso todo un hito en el sector de los parques de atracciones europeos, ya que este acelerador vertical se convirtió en el más alto y rápido del continente.
Con 112 metros de altura y 880 metros de recorrido, es capaz de acelerar de 0 a 180 km/h en tan solo cinco segundos, generando un tipo de emoción que nunca se había vivido en Europa.
Marc Gené, piloto de pruebas de Ferrari, afirmó que subirse a Red Force es lo más parecido a subirse en un Fórmula 1, ya que su aceleración y su fuerza de la atracción son similares a las de un monoplaza.
Además, un viaje en esta atracción dura lo mismo que lo que se tarda en dar una vuelta a cualquier circuito de Fórmula 1. Entre que te montas, aseguran las protecciones, te preparan, sales, das la vuelta, llegas y frenas, pasan entre uno y dos minutos. Es un hecho fortuito, pero produce todavía más la sensación de estar montado en un coche de Fórmula 1.